La tradición oral implica el desarrollo y buen manejo del lenguaje por parte de los expositores, y la agudeza del oído por parte de los receptores, afianza el sentimiento colectivo de su identidad y difunde el ejercicio de la palabra, el pensamiento y la cosmogonía ancestral. En la tradición Wayuu, el conocimiento y la experiencia cultural colectiva se realiza en forma espontánea, mediante la comunicación directa entre ascendientes y descendientes, entre ancianos y adultos, jóvenes y niños. La enseñanza para el Wayuu se basa sobre todo en la participación directa del niño en todas las actividades de los mayores siguiendo naturalmente la división por sexo y por edad las actividades.
Esta enseñanza que en muchos aspectos es común para niños y niñas, incluye no solo el aprendizaje de técnicas especificas sino también un proceso de socialización a través del cual se internalizan cuadros normativos, valores, costumbres, ritos, etc. El resultado total de esta experiencia educativa es una formación integral en el cual se desarrolla un tipo característico de percepción y una visión delo mundo que permea la cultura wayuu.
La enseñanza para el Wayuu se basa sobre todo en la participación directa del niño en todas las actividades de los mayores siguiendo naturalmente la división por sexo y por edad las actividades. Esta enseñanza que en muchos aspectos es común para niños y niñas, incluye no solo el aprendizaje de técnicas especificas sino también un proceso de socialización a través del cual se internalizan cuadros normativos, valores, costumbres, ritos, etc. El resultado total de esta experiencia educativa es una formación integral en el cual se desarrolla un tipo característico de percepción y una visión delo mundo que permea la cultura wayuu.
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